En las últimas décadas, se ha acumulado un conocimiento considerable sobre la importancia del ejercicio como tratamiento de primera línea en varias enfermedades crónicas. Es de destacar que hoy el ejercicio tiene un papel como medicina en diferentes enfermedades, y no solo en los trastornos del aparato locomotor como se creía antes. En este post, vamos a contaros los beneficios y aplicaciones del ejercicio en diferentes enfermedades: ictus, alzheimer, enfermedades coronarias, depresión, ansiedad, etc. 

La depresión es una causa común e importante de morbilidad y mortalidad en todo el mundo. Normalmente, suele tratarse con antidepresivos y terapia psicológica. Aún así la evidencia científica muestra mejoras muy notables con el ejercicio añadido a la terapia convencional. 

¿Qué dice la evidencia científica?

En el mundo occidental, el ejercicio físico es parte de un estilo de vida saludable.  El ejercicio es una actividad normal que puede conducir a un ciclo positivo, es decir, la persona que realiza ejercicio físico se siente normal.Además,  la actividad física a una intensidad relativamente alta hace que sea difícil pensar / preocuparse simultáneamente de manera excesiva, pudiendo utilizarse como una distracción de los pensamientos depresivos.

Las personas deprimidas a menudo sufren fatiga de manera continua, lo que puede conducir a la inactividad física, una pérdida de condición física y, por lo tanto, un aumento de la fatiga otra vez. La actividad física aumenta la capacidad aeróbica y la fuerza muscular y, por lo tanto el bienestar físico y reduce la sensación de fatiga.

El aumento de pulsaciones que tiene lugar durante el ejercicio a su vez generan en los pacientes la sensación de que no es malo. Y luego, cuando tienen episodios de ansiedad, donde el aumento de pulsaciones crece considerablemente, son capaces de superar mejor la situación.

¿Cuánto ejercicio se debe hacer?

Aunque cada paciente es un mundo, de manera general cuantas sesiones se hagan, mejor. Además, el entrenamiento de resistencia y mixto puede ser más efectivo que el entrenamiento aeróbico

La ansiedad es la patología mental más común hoy en día. Se estima que actualmente el 5% de la población adulta padece ansiedad. En el transcurso de un año, aproximadamente el 7% de la población experimentará algún tipo de trastorno de ansiedad. Las mujeres experimentan ansiedad el doble de veces que los hombres.

¿Qué dice la evidencia científica?

Se ha demostrado que la actividad física puede reducir los síntomas de ansiedad y tensión. El aumento de la respiración y la frecuencia cardíaca disminuye el miedo sufrido en la ansiedad. 

Algunos estudios hablan de la actividad física como forma de distracción para desvíar los síntomas de ansiedad del paciente. Como se describe para la depresión, la actividad física se considera parte de un estilo de vida saludable y las personas con enfermedades mentales que son físicamente activas pueden esperar comentarios positivos de su ambiente y contacto social, sintiéndose más aceptados.

¿Cuánto ejercicio hacer?

El programa de entrenamiento físico debe ser individualizado y supervisado.  Se recomienda comenzar con actividad física aeróbica de baja intensidad y aumentar de manera constante a intensidad moderada, con un aumento gradual de la duración. El ejercicio aeróbico progresivo supervisado es beneficioso. Ejemplos de ejercicio aeróbico incluyen caminar / correr, andar en bicicleta y nadar. La actividad física debe controlarse para que el paciente alcance gradualmente una escala de Borg de 15-16. Inicialmente, el entrenamiento debe ser de 12-13 en la Escala Borg durante 10-20 min con un aumento gradual de 15-16 por 30 min en total.

El estrés es extremadamente común en la vida cotidiana. El estrés por sí solo no es una enfermedad, pero el estrés a largo plazo puede conducir a la enfermedad. Por lo tanto, el estrés psicológico severo o prolongado no solo puede provocar depresión, sino que también puede causar enfermedades psicosomáticas como el asma y la artritis reumatoide.

Aunque no hay una medida exacta para el estrés, es posible medir niveles elevados de citocinas y hormonas del estrés, como el cortisol y las catecolaminas, que luego pueden servir como marcadores de estrés.

Además, las personas que se sienten estresadas a menudo tienen estilos de vida poco saludables: fuman tabaco, consumo de alcohol, dieta inadecuada y poco ejercicio. 

¿Qué dice la evidencia científica?

El entrenamiento físico puede tener un efecto positivo sobre los síntomas de estrés psicológico. Los individuos en buena forma física exhiben menos signos pronunciados de la activación fisiológica asociada con el estrés psicosocial.

Además, el ejercicio puede tener efectos psicológicos beneficiosos en los adolescentes, incluida la reducción del estrés si el ejercicio es de alta intensidad

¿Cuánto ejercicio debo hacer?

El programa de entrenamiento físico debe ser individualizado y supervisado. El entrenamiento debe incluir ejercicios aeróbicos que comiencen a baja intensidad y aumenten gradualmente a intensidad moderada, así como la duración de la actividad física debería aumentar constantemente. No hay evidencia de que hacer ejercicio a una intensidad específica sea más beneficioso que otro. El entrenamiento aeróbico puede implicar caminar / correr, andar en bicicleta o nadar.

La esquizofrenia es el nombre de un grupo de trastornos mentales caracterizados por pensamientos y emociones anormales. Los síntomas típicos de la esquizofrenia son alucinaciones, delirios y trastornos del pensamiento. La esquizofrenia afecta a 24 millones de personas en todo el mundo. El consenso general es que la esquizofrenia es causada por la combinación de factores biológicos, psicológicos y sociales. Se cree que la dopamina desempeña un papel en la patogénesis de la esquizofrenia. El tratamiento  consiste en el uso de medicamentos antipsicóticos, los cuales funcionan bloqueando gran parte de la actividad dopaminérgica en el cerebro.

¿Qué dice la evidencia?

Los síntomas psiquiátricos se redujeron significativamente mediante intervenciones que utilizaron alrededor de 90 minutos de ejercicio moderado a vigoroso por semana. También se informó que esta cantidad de ejercicio mejora el funcionamiento, los trastornos comórbidos y la cognición.

Las personas con esquizofrenia a menudo tienen síntomas como ansiedad y estrés, y la actividad física puede ayudar a aliviar estos síntomas.

Por otro lado, las personas con esquizofrenia a menudo tienen sobrepeso porque sus medicamentos estimulan su apetito y al mismo tiempo aumentan el retraimiento social y un estilo de vida físicamente inactivo. Por ello, una dieta saludable y actividad física disminuirá el peso de los pacientes que sufren obesidad. 

Además, algunos estudios indican que la actividad física actúa como un tipo de distracción, desviando la atención del paciente de las alucinaciones para que se perciban como menos problemáticas.

¿Cuánto ejercicio debemos hacer?

El programa de entrenamiento físico debe ser individualizado y supervisado por un equipo multidisciplinar. 

De manera general,  se recomienda empezar con ejercicio aeróbico de baja intensidad y aumentar gradualmente a intensidad moderada, e ir a su vez aumentando la duración.

En cuanto a los pacientes que sufren obesidad, deben estar físicamente activos al menos 1 hora al día.