1. Postura y técnica instrumental: muchas veces con pequeños cambios en nuestra postura/técnica podemos evitar y quitar muchos dolores y patologías. Es fundamental analizar nuestra postura, trabajar con espejo, etc.
movimientos compensatorios. (Indirectamente sobre la calidad del sonido).
2. Esquema corporal y propiocepción: los músicos muchas veces pierden la noción de su propio cuerpo y de como están colocados. Es muy importante tener una buena propiocepción y un buen control motor para no hacernos daño tocando.
3. Estudio y entorno de trabajo: en los músicos es fundamental establecer un buen horario de esturio (con sus correspondientes descansos) y tener un entorno de trabajo adecuado (buena iluminación, pocos ruidos, espacio suficiente, atril y silla a la altura correspondiente, etc.).
4. Respiración: muy importante en músicos de viento, aunque trabajar la respiración también beneficia al resto de los músicos. Técnicas para mejorara la capacidad respiratoria, el diafragma, etc.
Dependiendo del instrumento y de la manera de tocarlo apareceran diferentes patologías. No obstante según la evidencia las patologías más comunes en músicos son:
- Sordera
- Codo y antebrazo: epicondilitis y epitrocleitis
- Hombros: patología en el manguito rotador
- Muñeca y mano: tendinitis de Quervain, síndrome del tunel del carpo, neuralgias, distonías focales, temblores
- Problemas de embocadura: temblores, distonías, fatiga